9 zonas unidas por el agua: una nueva gota de esperanza

Toda la ciudad comparte un problema: la falta de agua y el servicio irregular de Empagua. Durante años los esfuerzos por exigir un acceso digno al agua los han llevado de manera aislada cada familia, cada comunidad o cada zona. Pero ahora surgió una red de vecinas y vecinos comprometidos a defender el derecho al agua potable, no solo para sus colonias, sino para toda la ciudad.
Vecinas y vecinos reunidos tras el proyecto Hidrocracia, que organizamos desde Quorum.

Es martes por la noche y un grupo de vecinas y vecinos de la Ciudad de Guatemala de zonas dispersas está conectado en una reunión virtual. Hace dos meses ni se conocían, pero les unió una causa particular: exigir la mejora del servicio de Empagua y que se les cumpla su derecho al agua potable.

“Creo que es bueno reunir a todos. De este grupo puede salir la mejor propuesta de mejora para la ciudad”, dice Pablo Rodríguez de la zona 24, uno de los integrantes.

La iniciativa de formar un grupo de personas de diferentes zonas afectadas por problemas con el agua, nació después de que participaron en una entrevista grupal sobre este problema, organizada por Quorum a principios de marzo. 

Al platicar sobre los impactos, la comunicación con Empagua y sus propuestas a posibles soluciones, se dieron cuenta que no es solo una, sino que son muchas las zonas que enfrentan el servicio irregular de agua.

Eso les motivó a crear un espacio para seguir conversando y buscando formas de trabajar juntos. Para la mayoría fue la primera vez que se reunían con personas de otras zonas para hablar sobre problemas en común.

“Para mi este grupo fue un gran choque de realidad, al entender y darme cuenta que lo que estamos pasando en Nimajuyú no es nada en comparación a otras zonas. Me motiva. Como vecina de Nimajuyú a que no tenemos que llegar a ese extremo, no lo debemos de permitir. Y para las zonas que ya están en ese extremo, a que ya no sigan padeciendo”, explica Mónica Pereira, de la zona 21.

Apoyo inesperado

Desde entonces esa pequeña red sigue creciendo en tamaño, aspiraciones y nivel de organización. En una de sus reuniones virtuales se incorporaron tres integrantes más.

Al principio eran ocho personas y ahora el grupo lo integran 18 hombres y mujeres de las zonas 1, 2, 6, 7, 17, 18, 21, 24 y de Santa Faz, Chinautla. Varias son áreas donde el problema con el acceso al agua se entrecruza con otros fenómenos graves, como la precariedad y la delincuencia. 

“Aquí en mi colonia están dejando agua con pipas y lastimosamente ya no vendrán porque los señores fueron amenazados, los están extorsionando. Pido su consejo por favor”, compartió una persona con el grupo a finales de abril. Por seguridad, resguardamos la identidad y la zona de las personas en este tema.

No tardaron las respuestas de solidaridad, además de ideas y acciones que funcionaron en otras zonas. 

  • “Algo que estamos haciendo es que van a andar dos o tres vecinos de su sector acompañando a cada pipa”. 
  • “Habla a los líderes comunitarios de cada sector para que den acompañamiento a los señores de las pipas, y así los jóvenes dejan de molestar. Se les está llegando a apoyar, no a molestar”, respondió otra.

A nivel personal, Mónica Pereira encontró solidaridad en la nueva red. En diciembre, Empagua presentó una denuncia penal en su contra donde la acusan de siete delitos después de que vecinas y vecinos abrieron la llave de distribución de forma manual porque 1280 se quedaron sin agua en Navidad. 

“Es emocionalmente una fortaleza saber que uno no está solo en la lucha. Las palabras de apoyo, cuando les actualizo es bien alentador”, dice la vecina.

Incluso considera que su proceso puede ser de utilidad para el grupo.

“Creo que mi experiencia va a servir por si a otro le quieren hacer lo mismo. Prevenir entre nosotros con base a lo que se ha vivido para que a nadie más lo logren criminalizar. Sin esa unión, esa información no fluye. Nos puede ayudar a fortalecernos y a cualquiera que llegue”, afirma.

Leé más: Empagua contra una vecina de Nimajuyú: la batalla por el agua

En la colectividad está la fuerza

La distribución geográfica de las personas más y menos afectadas por el servicio irregular de Empagua, es un tema que Carmen Reina resalta. Señala que existe una innegable dimensión social en el cumplimiento de este servicio público.

“Cuando nos encontramos aislados creemos que es un problema local y que se tienen que buscar respuestas individuales. Cuando vemos que es un problema global, hay oportunidad de articular una visión más colectiva y de actuar globalmente. Entonces se puede tener una mejor respuesta y una mejor esperanza, desde la demanda al agua hasta el emplazamiento de Empagua y de la Muni para que cumplan su obligación. Al generar una red incluso podemos hacer propuestas ciudadanas para mejorar la gobernanza del agua. La hidrocracia, como ustedes llaman”, explica.

La frustración por la falta de transparencia y respuestas de Empagua es común en casi todas las personas. En varias de las zonas de la capital, eso ha llevado a que las vecinas y vecinos han organizado protestas para ser escuchados y exigir soluciones. 

En ocasiones, después de la manifestación, reciben agua. Pero poco después, la llave se vuelve a cerrar y regresan a la situación anterior. Incluso, en algunas zonas, reciben agua sólo con anunciar la protesta. 

Mónica Pereira no tiene dudas, es una práctica que muestra que en vez de buscar soluciones reales, la Municipalidad y Empagua ponen el agua con tal apaciguar el descontento y la protesta. 

La vecina de zona 21 resalta que la formación de una red entre zonas ha dado lugar a poder comparar las acciones y la información de Empagua en las diferentes zonas.

Por ejemplo, ella tuvo acceso a un comunicado que Empagua emitió al sector Norte de la ciudad sobre un proyecto de llevar agua de la planta Ojo de Agua, que también abastece parte de la zona 21. Al mismo tiempo, la población de esa zona fue informada que se instalaría una bomba con más presión para mejorar el caudal.

“Pero desde que se reinstaló el servicio de agua en zona 21, lo que hay son quejas de que el caudal está más bajo. Entonces, la solución de Empagua es quitarle a unos para darle a otros, pero eso no es una solución real. Es solo querer callar luchas. Tener esas alianzas, esta comunicación, ayuda a evidenciar lo que Empagua comunica a cada sector en la Ciudad”, dice Mónica Pereira. 

Espera que la alianza entre zonas pueda hacer que las demandas de las protestas ahora sean tomadas en cuenta.

“Te imaginas, zona 21 ha sido ignorada en manifestaciones, Canalitos ha sido ignorada en sus manifestaciones, zona 18 fue ignorada. Por individual nos han ignorado. Ya lo probamos. Es ideal ya hacer una manifestación conjunta y ver si así, la Municipalidad se atreve a ignorarnos”, comenta Mónica Pereira.

Leé más: ¿El boom de apartamentos dejará sin agua a las y los vecinos?

Retos y propuestas

La falta de unión en las zonas y que las y los vecinos apoyen las iniciativas que puedan surgir, es uno de los retos que enfrenta la red. Aarón Aguilar, de Ciudad Nueva, zona 2, explica que también hay otros retos.

Señala que la división en la población a veces se debe a la influencia de personas que trabajan en la misma Municipalidad y a la corrupción en los órganos comunitarios, como los Consejos Comunitarios de Desarrollo Urbano y Rural (Cocode) y los Comités Únicos de Barrio (Cub). Incluso, algunas personas que se han pronunciado para exigir que se cumpla el derecho al agua, han recibido amenazas.

Entre el desgaste, el miedo o el desinterés, es difícil lograr cambios, explica Aarón, pero no pierda la esperanza.

“Creo que llega un momento donde el pueblo realmente se cansa de ver que le quieren dar atol con el dedo. Mi visión de esto es, ya somos tantas personas, ya no solo es cierta zona. Nos unimos y que la municipalidad nos escuche”, dice.

Una de las primeras propuestas del grupo, es organizar talleres para las y los integrantes, sobre la organización comunitaria y la estructura municipal, para comprender cómo funciona el poder local. Consideran también buscar capacitación técnica en el manejo del agua para poder plantear propuestas informadas. 

“Generar una red de concientización y que vayamos educándonos, no solo sobre el tema del agua, sino el tema de ser ciudadanos conscientes, que entendamos cómo funciona en este caso la Municipalidad, sus órganos, el Consejo, los procesos. A mi me encantó el “Cómo denunciar”, es algo que deberíamos replicar en cada uno de los temas, no solo el del agua”, explica Mónica Pereira.

Carmen Reina agrega que los procesos educativos también deben incluir sus vecinas y vecinos en las diferentes zonas, “porque al final cómo administrar el agua es un problema no solamente del gobierno municipal, sino de toda la ciudadanía”.

Expectativas e incidencia política

La reunión en línea continúa con uno de los puntos principales de la agenda: preparar una estrategia y presentación para reunirse pronto con una bancada política que aceptó una reunión con el grupo. 

Emociona a las y los integrantes. Es la primera oportunidad de incidencia política que tendrán como red. Poder ser escuchados, narrar los impactos del servicio irregular de Empagua en sus zonas, las similitudes y diferencias, y también sus demandas y propuestas, alienta las expectativas positivas. 

“Esto que se está dando a luz, este grupo, sé que es para algo bueno. Y yo quiero invitar a las otras zonas para que tengan la oportunidad de acercarse a los políticos y decirles que vayan a conocer otras zonas, otras problemáticas y cómo les afectan”, expresa Aarón Aguilar, de zona 2.

Su aspiración es que con el tiempo el grupo se formalice para que la Municipalidad de Guatemala o el Concejo Municipal se abran al diálogo y a la participación de la red.

“No estoy pidiendo que nos den trabajo, sino que nos den tiempo, una mesa o una reunión una vez al mes con este grupo de vecinos para que seamos escuchados”, dice.

Primero toca un pequeño pero importante paso; ponerle nombre a la red, uno que representa la importancia del agua y el esfuerzo por luchar para tenerla. En el grupo ya están contemplando ideas.

Te informamos rapidito
y sin spam

Total
0
Acciones
2 comentarios
  1. Me alegra sobremanera que varias personas de las distintas zonas de la ciudad estén unidos por el problema del agua,en vista que el agua fluje subterráneamente y no está circunscrita a una sola zona.
    En una reunión con vecinos de Nimajuyú que organizamos para escuchar a Juan Caros Godoy quedó claro para todos que lo que ocurre en Nimajuyú tiene que ver con lo que ocurre en el Trébol. La unión de vecinos es fundamental. Todo mi apoyo

  2. Me alegra sobremanera que varias personas de las distintas zonas de la ciudad estén unidas por el problema del agua,en vista que el agua fluje subterráneamente y no está circunscrita a una sola zona.
    En una reunión con vecinos de Nimajuyú que organizamos para escuchar a Juan Caros Godoy quedó claro para todos que lo que ocurre en Nimajuyú tiene que ver con lo que ocurre en el Trébol. La unión de vecinos es fundamental. Todo mi apoyo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicaciones relacionadas
Leé más

Un encuentro por el agua

Como parte del proyecto Hidrocracia realizamos un encuentro para conversar con vecinas y vecinos, funcionarios públicos y académicos sobre los problemas y retos al rededor del agua en la Ciudad de Guatemala.
Leé más

Estos 4 mapas explican la crisis de agua en la ciudad de Guatemala

La Municipalidad de Guatemala y la Empresa Municipal de Agua (Empagua) no cuentan con datos públicos sobre la situación del agua en la ciudad de Guatemala. Sin embargo diversos estudios académicos aportan información relevante no sólo para entender el problema sino para evidenciar la mala forma en que el agua es administrada por las municipalidades.