En Guatemala el 85% del negocio del petróleo lo controla la empresa franco-británica Perenco. La compañía explota desde 1987, el principal yacimiento petrolero del país, el pozo Xan.
Poco ha importado que la explotación petrolera no deje mayores ganancias para el país, o que la principal área de operaciones de Perenco se encuentre dentro de la Reserva de la Biósfera Maya. Cada gobierno de turno ha favorecido a la petrolera.
Durante el gobierno de Álvaro Colom se aprobó la última prórroga al contrato de Perenco. Esta termina en 2025 y a partir de esa fecha la empresa debería salir del país. Sin embargo el Ministerio de Energía y Minas (MEM) y el presidente Alejandro Giammattei, presentaron reformas a la Ley de Hidrocarburos para que Perenco pueda seguir operando indefinidamente.
¿De qué se tratan las reformas?
La ley actual, vigente desde 1983, establece que los contratos pueden tener una duración de hasta 25 años y terminado ese plazo el MEM puede autorizar una única prórroga por 15 años más.
- La propuesta busca ampliar los plazos de operación. El presidente y sus ministros podrían aprobar prórrogas continuas de 25 años.
La legislación actual establece una multa del 10% sobre el monto adeudado cuando las petroleras se atrasan en el pago de regalías al Estado.
- Con las reformas, las petroleras podrían evitar esa multa suscribiendo un convenio de pago con plazo de 24 meses.
En Guatemala poseen licencia de explotación petrolera 5 empresas. Según un acta reciente de la comisión de Energía y Minas, las empresas Petro Energy y Latin American Resources adeudaban hasta el año pasado US$66 Millones.
¿Por qué es preocupante?
“Guatemala invierte alrededor de 1 dólar, pero tiene una ganancia de 10 centavos, es decir, es sumamente caro extraer petróleo… Eso es absurdo”, explica el investigador y catedrático de la Universidad de San Carlos, Francisco Castañeda.
La explotación petrolera es un mal negocio para Guatemala. De la producción neta de hidrocarburos, el 30% de las ganancias son para el Estado y el resto para la petrolera.
Hasta allí no parece mal negocio pero la ley contempla unos “costos recuperables”. Gracias a esto, la empresa puede pedirle al Estado que le devuelva parte del dinero que ya invirtió en algunos gastos operativos y de desarrollo.
En otras palabras, Guatemala le repone a las petroleras lo que ellas gastan en extraer el petróleo. Además esos costos recuperables también les permiten reducir su pago de Impuesto Sobre la Renta. Negocio redondo para la petrolera.
- En 2005 el expresidente Óscar Berger aprobó un reglamento que amplió los gastos que podrían considerarse como “costos recuperables”.
- Un reporte del Observatorio de Industrias Extractivas evidencia que de 2009 a 2018 el Estado recibió por la extracción de petróleo $732 millones y devolvió a estas empresas $883 millones en concepto de costos recuperables. Es decir, Guatemala terminó perdiendo dinero.
El economista Ricardo Barrientos, del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales ICEFI, argumenta que hace falta hacer una revisión técnica y fiscal de las reformas a la Ley de Hidrocarburos porque únicamente están destinadas a beneficiar el contrato de Perenco.
“Los recursos de hidrocarburos son propiedad del Estado, están sometidos a pagos de regalías, pago en conceptos de producción compartida, los contratos no pueden ser indefinidos, deben determinarse. No vemos justificación para que automáticamente se renueve el contrato, específicamente de Perenco”, señaló.
¿Qué pasará ahora?
El exdiputado de Semilla y vicepresidente de la Comisión de Energía y Minas, Luis Fernando Pineda, asegura que aunque la reforma es importante aún deben hacerse más cambios. Sin embargo, todo apunta a que los diputados la conocerán en las próximas semanas.
TRISTEZA DE POLITICOS, ESTOS PROYECTOS SOLO LE LLENAN A NUESTROS CORRUPTOS LAS BOLSAS Y EL PAIS CADA DIA SIN RECURSOS Y POR LA EXTRACCION DEJAN MUCHA COMTAMINACION E IMPACTO A LA BIODIVERSIDAD, ESTAMOS REGALANDO LO POCO QUE TENEMOS, SI QUIEREN NUESTROS RECURSOS DEBEN PAGAR POR LO MENOS EL 40 o 50% POR SU EXTRACCION, NO DEJEMOS QUE TERMINEN CON ELLOS CON ESOS CONVENIOS QUE SI LOS INVESTIGAMOS TIENEN BENEFICIOS PARA LOS QUE LOS GIRMARON, SALU2.